MADRID.- Las 17 legislaciones diferentes que existen en cada comunidad autónoma es un problema para el desarrollo y el crecimiento del sector del turismo rural y los apartamentos en España. Esta es una de las principales conclusiones de un desayuno de trabajo organizado por Networking Activo y al que asistieron personalidades como Laura Rivera-Casares, responsable comercial de Homelidays España; Eduardo Basanta, responsable de comunicación de Rentalia; Ana García, responsable de comunicación de Toprural; Beatriz Oficialdegui, directora de marketing de Destinia; y Jaume Cladera, responsable de distribución y venta de Garden Hotels.
Laura Rivera-Casares destaca que “en algunas comunidades hay dificultades para el negocio del alquiler o directamente está prohibido”, como en Canarias. Por su lado, Eduardo Basanta sostiene que “como propietario es casi imposible enterarse de qué hay que hacer para cumplir con la ley”. Ambos responsables explican que en el archipiélago canario las autoridades han contactado con propietarios para avisarles de que se les va a multar si siguen alquilando. La solución que toman no es dejar de alquilar, sino hacerlo públicamente y pasar a la clandestinidad.
A la cuestión legislativa hay que sumarle la inexistencia de un sistema de clasificación homogéneo para determinar la calidad de las casas rurales y los apartamentos. Ello hace que el consumidor se sienta desorientado, un aspecto aún más clave con el turista internacional.
Otro de los temas que suscitó interés en el encuentro fue el de la necesidad de que el turismo rural y el alquiler constituyan una asociación fuerte que defienda los intereses del sector. Rivera-Casares explicó que España se encuentra en una situación privilegiada debido a la crisis y la cantidad de casas vacías (hasta en 3 millones las cifró la responsable comercial de Homelidays). A juicio de Rivera-Casares se debe crear una legislación de alquiler que permita rentabilizar parte de este parque de viviendas, algo en lo que se podría presionar si existiese una federación potente de asociaciones de propietarios.
Internacionalización como solución
La salida a otros mercados también fue uno de los asuntos discutidos en la jornada. Beatriz Oficialdegui reveló que en Destinia “estamos pujando mucho por el turismo de Oriente Medio”. La responsable de Destinia explicó que este mercado puede tener “bastante potencial” debido al elevado gasto medio de sus turistas. El problema, según mantuvo Oficialdegui, es que estos turistas aún no están acostumbrados al mundo on line.
Por su lado, Jaume Cladera sostuvo que “Rusia es un país tan grande que, aunque haya pocos turistas que puedan viajar, ya son suficientes” para que un destino note el retorno económico. En lo que va de año han llegado a España 1 millón de turistas procedentes de Rusia, según los datos de Frontur, encuesta elaborada por el Instituto de Estudios Turísticos (IET). Cladera manifestó que la rentabilidad en los hoteles de Garden se debe conseguir en los tres meses principales del verano, ya que el resto del año es temporada baja en las Islas Baleares. Por eso, los nuevos mercados que permitan desestacionalizar la demanda son claves para el crecimiento del alojamiento vacacional.
Por último, Eduardo Basanta refirió que entrar en un mercado nuevo no es sencillo y que hay que estudiar la idiosincrasia del mismo antes de introducirse. El trabajo de internacionalización no sólo consiste en traducir la página del negocio.