Muchas ciudades españolas cuentan con un patrimonio arquitectónico que no saben explotar. No son pocos los municipios que ni muestran estos edificios singulares ni tienen intención de hacerlo. Madrid quiere estar entre las excepciones y desde la oficina de turismo de la capital han lanzado “Itinerarios de Arquitectura: Pasear Madrid”. Se trata de un programa turístico que ofrece rutas guiadas por arquitectos a diferentes lugares de la ciudad. También se visitará y explicará el interior de los inmuebles más significativos. El Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM) colabora aportando los expertos que desvelarán los secretos de los edificios.
La propuesta se ha puesto en marcha en colaboración (lucrativa, por supuesto) con el Grupo Orizonia, que a través de su red de agencias y mayoristas la comercializará. También cuenta con una página en Internet, creada por el grupo, para realizar las reservas. Este es el único punto algo criticable, ya que las rutas deberían ser un servicio ofrecido directamente por la Oficina de Turismo de Madrid, cobrando la cantidad correspondiente. Por otro lado, es cierto que gracias a Orizonia y su capilaridad la oferta de “Pasear Madrid” llegará a más turistas que si solo se comercializase a través de las típicas oficinas de turismo.
Los paseos se concentrarán en tres itinerarios: Paseo del Arte, Eje Castellana-Serrano y Eje Alcalá-Gran Vía. Y los mismos están programados para todos los sábados del año e incluyen, como mínimo, una noche de hotel.
La ciudad de Madrid presentó recientemente su plan estratégico de turismo, en el que se incluyen programas como este para favorecer la mayor afluencia de visitantes a Madrid y conseguir un mayor gasto de los mismos. Sin duda, esta es una muy buena iniciativa que pone en valor el patrimonio arquitectónico de la capital de España (de una vez por todas) y que debería ampliarse a otros puntos de la región. Quizá las autoridades de turismo de la Comunidad de Madrid (mermadas tras los diferentes recortes de Esperanza Aguirre) deberían tomar ejemplo: San Lorenzo de El Escorial, Aranjuez, Chinchón, etcétera. Un programa común, en colaboración con turoperadores, para explotar turísticamente estos enclaves podría ser muy beneficioso. Otra cosa es que haya ganas e inteligencia para llevarlo a cabo.