MADRID.- El Gobierno de la Comunidad de Madrid se dispone a dar cobertura legal a los denominados hostels, establecimientos en los que las habitaciones pueden albergar literas con varias camas. Este un medio de alojamiento muy presente en Europa y que en Madrid aún no cuenta con un arraigo importante. Así, el Ejecutivo que preside Ignacio González (PP) ha dado el visto bueno a un decreto que regulará la actividad de estos establecimientos.
De momento hay 15 hostels abiertos (1.800 camas) en la Comunidad de Madrid, aunque la inexistencia de una regulación para los mismos hacía que la inseguridad jurídica no hiciese invertir a posibles interesados. Con el nuevo decreto, el gobierno regional espera que se abran 20 hostels en el plazo de tres años y que esto incremente la cifra de turistas en unos 500.000. La ocupación media de estos alojamientos es del 85% y se caracterizan por sus precios reducidos.
La característica principal de los hostels es que cuentan con habitaciones con literas para grupos (como familias o amigos), pero también con habitaciones individuales y dobles. El Gobierno regional los clasificará en una única categoría y se ubicarán en edificios integrales. Además, en el precio del alojamiento se entenderán incluidos los suministros de agua, energía, climatización, uso de ropa de cama y baño y limpieza de habitaciones. Los establecimientos que cuenten con un número inferior a 50 habitaciones deberán ofertar una habitación adaptada para personas con discapacidad, incrementándose esta proporción en una habitación adaptada más, por cada 50 habitaciones o fracción. Los cuartos de baño podrán ser individuales o colectivos y estarán dotados de lavabo, inodoro y ducha. Asimismo, estos alojamientos deberán ofrecer a sus huéspedes acceso a medios telemáticos y ordenadores, así como a teléfonos. También deberán contar con lavadora/secadora, servicio de desayuno e información turística de Madrid.
El tipo de usuario de estos establecimientos suelen ser familias o grupos de amigos y no necesariamente con bajo poder adquisitivo. Muchos turistas prefieren gastar poco dinero en un alojamiento que les garantice cierta comodidad a cambio de poder disfrutar de otros atractivos de la ciudad.