La Organización Mundial del Turismo (OMT) prevé una caída de entre el 20% y el 30% en el número de viajes internacionales que se producirán en 2020 como consecuencia de la pandemia de coronavirus Covid-19. Este descenso en los movimientos de viajeros conllevará una pérdida de ingresos por turismo que ascendería a 450.000 millones de dólares (411.453 millones de euros), según la OMT. El organismo de Naciones Unidas estima que las cifras significan perder entre cinco y siete años de crecimiento en el negocio turístico. En los últimos diez años, el número de viajeros internacionales, y de ingresos por turismo, habían alcanzado records históricos.
Este impacto económico se notará más en aquellos países donde el negocio turístico supone una buena parte de la actividad nacional. Por ejemplo en España, donde los viajes generan el 12% del PIB y dan empleo cada año, de forma directa, a más de 2 millones de trabajadores. Las restricciones de movimientos han desatado una reacción en cadena en el sector: cierre de hoteles, suspensión de contratos de trabajo a los empleados, cancelación de cruceros, clausura de agencias de viajes, imposibilidad de volar para las aerolíneas, cierres de comercios, bares y restaurantes, etcétera.
Zurab Pololikashvili, secretario general del OMT, cuya sede se encuentra en Madrid, ha recordado que alrededor del 80% del sector empresarial turístico mundial está compuesto por pequeñas y medianas empresas. Los diferentes gobiernos internacionales están poniendo en marcha medidas para intentar paliar la crisis económica que producirá el parón empresarial inducido por el Covid-19. En EEUU se ha aprobado un paquete de 2 billones de dólares con ayudas directas para personas y empresas, mientras que en España el gobierno ha flexibilizado el pago de cuotas sociales, las suspensiones de contratos de trabajo, ha lanzado líneas de financiación para las empresas y concederá subsidios de paro y moratorias en el pago de alquileres e hipotecas para los ciudadanos.
La OMT ha elaborado un documento con 23 recomendaciones para que los gobiernos y las empresas del sector turístico preparen la reactivación económica cuando se controle la epidemia de Covid-19. Estas medidas se fundamentan en mantener el empleo, apoyar a los trabajadores por cuenta propia, asegurar la liquidez de las empresas, promover el desarrollo de competencias y revisar los impuestos, tasas y normativa relacionados con los viajes y el turismo. La organización también pide que se proporcionen estímulos financieros, con políticas fiscales favorables, levantamiento de restricciones de viajes tan pronto como la emergencia sanitaria lo permita, flexibilización del régimen de visados, impulso al marketing y a la confianza de los consumidores, entre otras medidas, para acelerar la recuperación.