MADRID.- Entre 75 y 80 millones de turistas anuales en 2015. Estos son los deberes que Álvaro Klecker, socio responsable de turismo en la consultora PwC, ha puesto al sector en una jornada organizada para revelar los desafíos a los que se enfrenta este negocio. Klecker ha señalado que el objetivo es alcanzable si se mejoran los tres pilares en los que incide el informe “Temas candentes del turismo para 2013” que ha preparado la firma.
El primero de ellos es mejorar la atracción de turistas. Para ello, el socio de PwC ha explicado que se deben renovar los destinos turísticos, sobre todo los de sol y playa, tendiendo a una caracterización que los haga únicos. Por otro lado, Klecker ha hecho suya, ante un auditorio compuesto por representantes del sector privado y público, una demanda de las empresas: la reducción de la burocracia administrativa y la facilitación de los procesos para obtener licencias y comenzar negocios. Otra de las claves para aumentar la llegada de turistas es dar a conocer mejor toda la oferta del turismo español, sobre todo la de los destinos de interior, así como la gastronómica, cultural, deportiva, de ocio y de salud. El turismo de negocios e incentivos también es clave en esta estrategia, según PwC, ya que España es el tercer país del mundo en el que más reuniones de negocios y eventos relacionados se celebran.
Un aspecto importante que ha resaltado Klecker es la necesidad de mirar más allá de nuestros mercados tradicionales (Reino Unido, Alemania y Francia) para poner en foco en economías emergentes como las latinoamericanas, donde se está creando una clase media con poder adquisitivo. A este respecto, el socio de PwC ha comentado que en 2012 se sumaron al mercado cerca de 11 millones de jóvenes con capacidad para comprar un billete de avión hasta España. Por último, en este apartado, el uso de la tecnología, el concimiento del cliente y la necesidad de ligarse a la industria del entretenimiento también son claves.
El segundo de los pilares para mejorar el turismo español es la desestacionalización del mismo. En la actual, el negocio depende demasiado de la temporada veraniega, momento en el que se produce la mayor afluencia de turistas a nuestro país. Klecker ha propuesto crear una tarjeta de fidelización con puntos que se acumularían y darían derecho a descuentos en función de los viajes de un mismo turista a España. Esto también repercutiría positivamente en la “marca España”. Además, el responsable de PwC cree indispensable anticipar las reservas y no depender tanto del último minuto.
El último de los pilares clave es la rentabilidad del negocio, que ha reducido sus márgenes de forma considerable, más durante los últimos años de crisis que azotan la economía española con tasas de paro superiores al 25% de la población activa. Para el respnsable de PwC se debería regular la intermediación hotelera en internet para fijar unos márgenes mínimos y que no se produzca la pérdida de rentabilidad del hotelero con precios bajos en la mayoría de ocasiones. Klcker también considera que la oferta alojativa independiente daña al sector y a las grandes cadenas, vendiendo en muchas ocasiones a tarifas demasiado baratas.
En cuanto a aerolíneas y agencias de viajes, desde PwC consideran que son dos sectores que debenn reestructurarse.Klecker ha puesto el ejemplo de Iberia, cuya transformación (con el despido de más de 3.100 personas y el abandono de rutas no rentables) muestra el estado de las compañías de red frente a la competencia de las de bajo coste, tipo Ryanair. El socio de PwC ha destacado que las líneas aéreas tradicionales cuentan con plantillas muy antiguas y abultadas que tendrán que reducir. En el caso de las agencias, Klecker ha usado las quiebras de Marsans y Orizonia para ejemplificar que no se pueden tener 1.500 puntos de venta con personal no formado, puesto que la clave se encuentra en dar una venta con valor añadido.