El Gobierno español ha previsto una inversión de 3.400 millones de euros en un plan de modernización del turismo para los próximos años. Este dinero provendrá de los fondos europeos (Next Generation EU) para la recuperación de la crisis económica provocada por el coronavirus, dotado con 750.000 millones.
Este fondo de ayuda se aprobó hace casi un año por los estados miembros de la Unión Europea (UE) con bastante polémica, porque algunos países del centro y norte de Europa, como Austria, Holanda o Suecia, no se fiaban de la gestión del gasto que realizarían otros como España, Portugal o Grecia. A día de hoy, el dinero del fondo aún no se ha desembolsado a los estados miembros de la UE.
La inversión para turismo se ha incluido en el “Plan de recuperación, transformación y resiliencia” que ha enviado a Bruselas el ejecutivo que preside Pedro Sánchez (PSOE). En este plan, que consta de varias medidas, también se contemplan inversiones para otras áreas de la economía nacional, como la industria, la investigación y el desarrollo o la agricultura, entre otros. En total, el documento cifra en 69.528 millones de euros las inversiones previstas por el Gobierno español con los fondos de la UE. En la escala de los 26 programas reflejados, el turismo se halla en novena posición en volumen de fondos. La actividad turística aporta a España un 12% de su riqueza y un nivel similar de empleo (algo más de 2 millones de trabajadores).
Sin embargo, la propuesta gubernamental no da muchos detalles sobre cómo se gastarán estos 3.400 millones. El informe que el Gobierno ha enviado a Bruselas habla de digitalización del turismo y de inclusión de esta actividad económica en la estrategia de economía circular. Pero el resto del documento sólo menciona generalidades. Por ejemplo, en la página 58 se indica que “en el caso del sector turístico, el Plan contempla inversiones por un total de 3.400 millones para fomentar su resiliencia, modernización y transformación digital”.
La única información que contiene el plan sobre la modernización del turismo se encuentra en la página 144. En esta sección, el documento indica que se actuará sobre diversos ámbitos:
- Transformación del modelo turístico español hacia la sostenibilidad medioambiental, socioeconómica y territorial. Para realizar esta labor, que se lleva repitiendo como un mantra desde hace más de 30 años, el Gobierno se apoyará en la Estrategia de Turismo Sostenible España 2030, en los planes de sostenibilidad turística de los destinos y en los de sostenibilidad social. También se añade que se ordenará y coordinará el mercado de viviendas de uso turístico, una competencia atribuida a cada comunidad autónoma y en la que el Estado tiene poco que decir en este momento. En la presentación de la estrategia de sostenibilidad para los destinos, Reyes Maroto, ministra de Industria, Comercio y Turismo de España, ha explicado que “en los próximos tres años vamos a invertir más de 1.900 millones de euros en nuestros destinos turísticos para reforzar su sostenibilidad en su triple dimensión: medioambiental, socioeconómica y territorial”.
- Otro eje será la transformación digital de los destinos y empresas turísticas, sin dar más información sobre cómo se realizará, junto con la construcción de un sistema de “inteligencia turística” fundamentada en los datos.
- También se pondrán en marcha “planes de resiliencia específicos” en los archipiélagos canario y balear, y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Con ello se pretende apoyar la innovación, la adaptación al cambio climático, la diversificación del producto y la desestacionalización.
- Por último, se impulsará la competitividad a través del desarrollo de productos turísticos, eficiencia energética, economía circular, mantenimiento y rehabilitación del patrimonio histórico y la mejora de zonas comerciales con gran afluencia turística.
El plan que el Gobierno ha enviado a la Comisión Europea va acompañado de varios anexos en los que se desglosan algunos hitos alcanzados en el desarrollo de cada una de las estrategias desde 2020. En la página 24 de este anexo se indica que para el plan de impulso del sector turístico se han contemplado 28 medidas con una dotación de 4.262 millones de euros, importe que no coincide con los 3.400 millones de euros previstos en el plan de resiliencia para el sector turístico. El aspecto más importante es el denominado Fondo Financiero del Estado para la Competitividad Turística (Focit), que contará con 515 millones y su finalidad será dar préstamos a las empresas turísticas que presenten proyectos para “la mejora de la competitividad y acelerar el sector hacia un modelo más sostenible”.
El objetivo de la mayoría de medidas de este plan de “resiliencia”, la palabra de moda en el vocabulario político, es cambiar el modelo económico hacia uno más respetuoso con el medio ambiente, con las personas y en el que el uso de las tecnologías digitales tenga una mayor preponderancia. Estas líneas estratégicas son las mismas que las del Fondo Next Generation EU, con el que se quiere lograr la modernización de la UE con más investigación e innovación, luchar contra el cambio climático o conseguir la igualdad de género, entre otras medidas. Además de los 750.000 millones de euros del fondo contra la crisis provocada por el coronavirus, la UE también dedicará 1 billón de euros a estas y otras políticas entre 2021 y 2027.