MADRID.- El Gobierno ha aprobado el anteproyecto de la Ley de Emprendedores, una norma esperada por los empresarios, autónomos y futuros emprendedores de España que tiene como objetivo prioritario facilitar la puesta en marcha de negocios. Otra cosa es que lo consiga. Ahora, el proyecto debe pasar por el trámite legislativo: informe, ponencia y enmiendas en el Congreso de los Diputados e idénticos pasos en el Senado. Por ello, la aprobación y puesta en marcha de la Ley no se espera hasta después del verano.
Uno de los aspectos más destacables de la norma es la introducción del IVA de caja, que entrará en vigor el 1 de enero de 2014. Gracias al mismo, las empresas que tengan ingresos inferiores a los 2 millones de euros anuales sólo pagarán el IVA de las facturas que emitan cuando cobren las mismas y no antes, como sucede en la actualidad. Eso sí, para poder acogerse a este régimen (al que no podrán acceder las empresas y empresarios que tributen en el sistema de módulos) el profesional deberá pagar las facturas que reciba. De esta manera, el Gobierno se asegura que las pymes cumplan con los plazos de pago, recaudar las cuotas de IVA y generar el suficiente flujo como para permitir que el IVA de las facturas impagadas no se abone.
El Gobierno también pretende que la limitación de responsabilidad con la que cuentan las sociedades limitadas y anónimas se extienda a los empresarios, impidiendo el embargo de sus pisos cuando el mismo se produzca como consecuencia de impagos o concursos de sus negocios. Además, se crea la figura de la segunda oportunidad, un mecanismo de negociación extrajudicial de deudas empresariales fuera del concurso de acreedores, siempre lento y costoso para todas las partes. También se protegerá al autónomo y al empresario de responsabilidad limitada frente a los embargos de Hacienda y la Seguridad Social por el impago de cuotas cuando el mismo afecte a su vivienda habitual.
También se podrá crear una sociedad limitada con un capital inferior a 3.000 euros (el mínimo legal) de forma sucesiva, con pequeñas aportaciones hasta completar o superar esta cantidad. De esta manera, el Ejecutivo que preside Mariano Rajoy (PP) pretende facilitar la creación de empresas a aquellas personas que no disponen de los suficientes recursos económicos. Junto a esto, la agilización de la creación de empresas es otro punto destacable. Se crearán más ventanillas únicas para la puesta en marcha de las empresas y se potenciará el uso de Internet como forma de hacerlo, con un programa denominado “Emprende en 3-Administraciones” que pretende concentrar los procesos administrativos que se dan en el Estado, comunidades autónomas y ayuntamientos.
Incentivos fiscales
Otra batería de medidas que recoge la ley se refiere a los incentivos para que las empresas en crecimiento paguen menos impuestos. Así, las empresas con una cifra de negocio inferior a 10 millones de euros podrán deducire del Impuesto de Sociedades el 10% de los beneficios que reinviertan en el negocio. También se aumentan los plazos para deducirse las inversiónes en investigación y desarrollo, y se reduce en un 60% la cuota tributaria a pagar por la cesión de patentes. El Gobierno quiere que este último punto sirva para fomentar la inventiva y la innovación en España para después poder exportarla a empresas de otros países.
Otro punto destacable es que el Gobierno quiere convertir España en un país que acoja inversores y emprendedores extranjeros. Para ello agilizará la concesión de permisos de residencia a inversores de cuantías significativas, emprendedores en actividades innovadoras o profesionales muy cualificados.
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