MADRID.- Mariano Rajoy, presidente del Gobierno, ha anunciado que el Ejecutivo aprobará un incremento del IVA el próximo viernes 13 de julio. El tipo general del IVA pasará del 18% al 21%, mientras que el reducido subirá del 8% al 10%. En este último se engloban las actividades turísticas y de ocio. Por su lado, el tipo superreducido del 4%, que grava determinados bienes indispensables, se queda sin modificación. Finalmente, el Gobierno ha preferido una subida generalizada frente a un retoque específico de la tributación de algunos productos.
Como venía temiendo el sector turístico, el Gobierno ha decidido penalizar a la única industria que todavía crece en España y genera empleo. La subida de dos puntos del IVA es menor de la esperada en el peor escenario, que preveía un incremento hasta el 18%. Sin embargo, la decisión del Ejecutivo de incrementar el IVA en las actividades turísticas desautorizan las declaraciones de José Manuel Soria, ministro de Industria, Energía y Turismo, que la negó, o de Isabel Borrego, secretaria de Estado de Turismo.
La consecuencia más inmediata de esta subida para el consumidor es que los precios de los bienes y servicios se incrementarán. Aunque Rajoy no ha precisado cuando entrará en vigor el incremento del IVA es probable que se produzca en el mes de agosto o en septiembre. En agosto se produce un repunte del consumo debido a las vacaciones, mientras que en septiembre finaliza la temporada turística y no se penalizaría al turista extranjero.
De esta manera, los billetes de avión (que ya han subido por el incremento de las tasas aeroportuarias), los de tren, los paquetes vacacionales, las noches de hotel, el alquiler de coches o las entradas a parques temáticos verán sus precios subir. Todos los bienes y servicios tendrán mayor precio, con lo que es probable que el consumo, ya de por sí muy plano, se resienta en los próximos meses. Además, las empresas verán como sus costes crecen, por lo que su margen de beneficio se reducirá, lo que incidirá negativamente en el empleo.
Las diversas patronales del sector, desde Exceltur hasta la hotelera CEHAT, se han manifestado en contra de cualquier subida del IVA. De hecho, en un informe realizado por Exceltur se prevé que por cada punto adicional de IVA se perderán 1.005 millones de euros en ingresos y casi 10.000 empleos turísticos. Con estas cifras y teniendo en cuenta que el IVA en las actividades turísticas crecerá dos puntos, es probable que se produzca una pérdida de 2.010 millones de euros en ingresos y 20.000 empleos menos en el primer año de subida. Otro estudio referido a la hostelería pronostica una pérdida de 130.000 trabajos por el incremento del impuesto al consumo.