El Gobierno ve “inaceptable” que Iberia suprima rutas en Latinoamérica

Iberia, en pleno proceso de revisión | Foto: Iberia

MADRID.- Iberia es más que una empresa privada. Al menos esto es lo que se desprende de las declaraciones que varios ministros han realizado en los últimos días a cuenta de los planes de Iberia para despedir a 4.500 de sus 19.000 empleados y para reducir rutas a algunos mercados latinoamericanos.

José Manuel Soria, ministro de Industria, Energía y Comercio, ha referido que es “inaceptable” que para ir de Madrid a La Habana (Cuba) haya que pasar por Londres. El ministro del ramo turístico ha pedido que Iberia mantenga sus rutas a Latinoamérica. Santo Domingo (República Dominicana) y La Habana son dos de los destinos que Iberia tiene previsto dejar de operar desde principios de 2013.

Ante estas declaraciones, la compañía aérea ha explicado que “los pasajeros van a seguir contando con vuelos directos entre Madrid y los destinos que se va a suspender, bien porque esas rutas ya son operadas por otras aerolíneas o porque Iberia ofrecerá esos destinos en conexión a través de otras ciudades de la red de Iberia”. Además, la línea aérea presidida por Antonio Vázquez agrega que  “Air Europa vuela seis veces a la semana entre Madrid y La Habana y Cubana de Aviación opera dos vuelos semanales. Además, Air Europa ofrece un vuelo diario entre Madrid y Santo Domingo. No existe ningún vuelo directo entre Londres y estos dos destinos latinoamericanos”.

Soria se ha reunido con los directivos de Iberia para trasladarles la necesidad de que la compañía siga operando vuelos a Latinoamérica por la importancia económica de este mercado para España. No obstante, el ministro ha asegurado que respeta las decisiones que tome IAG, el conglomerado financiero que resultó de la fusión entre Iberia y British Airways.

Al ministro de Turismo se ha sumado el departamento que dirige Ana Pastor, ministra de Fomento, donde se recuerda que ni en tiempos de la dictadura de  Franco se suprimió la conexión entre Madrid y La Habana. Estas son las presiones públicas, pero en privado el ruido gubernamental debe de ser mayor y los directivos de la calle Velázquez, donde tiene su sede Iberia, están sufriendo las presiones desde los más altos estamentos. Las declaraciones también sirven de aviso a Willie Walsh, consejero delegado de IAG, y al que apuntan todas las miradas como artífice del plan de reestructuración de Iberia.

Las declaraciones del Gobierno tienen su importancia porque indirectamente es accionista mayoritario de IAG a través de Bankia. La entidad financiera (antigua Caja Madrid) cuenta con una participación del 12,08% en IAG. Y Bnakia está nacionalizada por el Gobierno español debido a la pésima gestión que ha puesto al banco al borde de la quiebra.

Oposición sindical y plan de rutas

Todos los sindicatos de Iberia, desde los que representan a los pilotos hasta el personal de tierra, se han opuesto al plan de la aerolínea para despedir a 4.500 personas de una plantilla de 19.000. Además de los despidos, Iberia pretende reducir su flota e ir renovándola para optimizar los costes de combustible.

De momento, gracias a la presión del Gobierno, se ha logrado desconvocar la huelga planteada entre el día 14 y el 21 de diciembre, aunque los sindicatos (que están llamados a negociar las condiciones del ERE) han avisado de que si no hay acuerdo acudirán a los paros a partir del 7 de enero. Por su lado, el 31 de enero es la fecha tope que Iberia se ha dado para llegar a un acuerdo, en caso contrario, y con la nueva reforma laboral aprobada por el Partido popular, la compañía aérea podrá aplicar las condiciones que considere necesarias. Hay que recordar que Iberia lleva en pérdidas desde 2010 y en los últimos nueve meses sus números rojos ascienden a 262 millones de euros.

Por otro lado, la firma aérea ha informado de que potenciará las conexiones de largo radio donde existe una mayor demanda, mejor equilibrio entre tráfico de negocios y tráfico turístico, y más posibilidades de crecer en el futuro. Esto implica que abandonará rutas deficitarias como Atenas, El Cairo y Estambul, que se suspenderán a partir de mediados de enero, mientras que en largo radio Iberia dejará de volar desde el 1 de abril de 2013 a Santo Domingo y a La Habana.