Fernando Valdés, secretario de Estado de Turismo de España, ha explicado que el Gobierno español está preparado para permitir que los turistas británicos vacunados e inmunizados viajen en verano al país mediterráneo en el caso de que la Comisión Europea (CE) no apruebe un certificado de vacunación. Valdés ha realizado estas afirmaciones en Bloomberg TV.
El secretario de Estado ha destacado que la solución para reactivar los viajes en Europa debe venir de las insticiones de la Unión Europea (UE), pero que si no se llega a un acuerdo en las mismas sobre la puesta en marcha de los certificados sanitarios, España tendrá que negociar con los países no miembros para abrir corredores turísticos. Reino Unido no es un estado miembro de la UE desde finales de 2020 tras el Brexit. España es la primera interesada en los certificados sanitarios, pues los turistas británicos son el primer mercado de visitantes extranjeros al país. En 2019, el último año antes de la pandemia de coronavirus, llegaron a España 18 millones de británicos, el 21,5% de todos los turistas que recibió España ese ejercicio. El gasto turístico de los británicos en España ascendió a 17.800 millones de euros en 2019, un 19% del gasto turístico total. El segundo mercado de visitantes para el país europeo es Alemania, con 11 millones de turistas anuales.
El certificado sanitario, también denominado certificado de vacunación o pasaporte de vacunación, fue una idea propuesta por Kyriakos Mitsotakis, primer ministro griego. El objetivo de este documento es acreditar que la persona que lo tiene ha sido vacunada contra el coronavirus SARS-Cov-2, lo que le ha conferido inmunidad contra el virus y tiene más dificultades para infectarse, por lo que podría viajar con libertad por la UE. Sin embargo, la medida, que apoyan los países más turísticos, como España, Portugal o Italia, ha creado divisiones en la Unión Europea. La CE lleva negociando las condiciones de este documento desde mediados de febrero sin ningún resultado positivo. Los expertos tienen dudas sobre los peligros que puede provocar, el primero por la falsa sensación de seguridad que puede dar, al relajarse las medidas de protección (uso de mascarilla, distancia social y lavado de manos); la segunda, porque aún no se sabe con total certeza si las personas vacunadas pueden contraer el virus, aunque no se pongan enfermas, y contagiarlo a otros no vacunados en sus desplazamientos.
Valdés ha confirmado en Bllomberg TV que se halla en conversaciones con las autoridades del Reino Unido para establecer estos corredores, así como con otros países que no integran la UE. Por su lado, Matt Hancock, secretario de Salud del Reino Unido, también ha confirmado contactos con otros gobiernos y la UE para que los británicos puedan vacacionar en verano, según el diario The Guardian.
Los corredores turísticos se iniciaron por Nueva Zelanda y Australia en 2020 para los viajes entre los dos países. Después, la idea fue copiada por las Islas Canarias, que lanzaron un corredor sanitario con el Reino Unido a finales de octubre de 2020, pues los británicos son el principal mercado de turistas para el archipiélago español en los meses de invierno. Sin embargo, este corredor no llegó a funcionar a pleno rendimiento porque Boris Johnson, primer ministro del Reino Unido, decretó un confinamiento de la población por el incremento de los contagios por el coronavirus y el surgimiento de nuevas cepas.