MADRID.- IAG, el grupo aéreo surgido de la fusión entre Iberia y British Airways, comprará Vueling por 113,35 millones de euros, según una comunicación enviada a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El conglomerado ha lanzado una Oferta Pública de Adquisición (OPA) de acciones por el resto del capital de la línea aérea catalana. IAG ya posee el 45,85% del capital de Vueling, por lo que la compra afectaría al resto de las acciones, en manos de otros inversores y de la bolsa.
IAG ha puesto un precio de 7 euros por acción de Vueling, lo que supone una prima del 27,97% sobre el precio de cierre de las acciones de la aerolínea en la Bolsa el jueves 7 de noviembre, según ha comunicado el holding aéreo a la CNMV. La decisión de comprar el resto de acciones de Vueling ha sido tomada por el Consejo de Administración de IAG en la reunión mantenida esta mañana. Además, el viernes 9 de noviembre queda otra noticia de alcance, que será el plan de recorte de puestos de trabajo en Iberia. Este plan ya ha sido aprobado en la misma reunión en la que se ha decidido adquirir Vueling, pero mañana se dará a conocer públicamente a los sindicatos.
Tras la compra de Vueling, IAG se encontrará con dos aerolíneas que competirán por los mismos segmentos de negocio: Iberia Express y Vueling. La primera nació en marzo de 2012 como forma de conseguir que las rutas de corto y medio radio que operaba Iberia fuesen rentables. Habrá que ver cómo se produce la coexistencia de ambas compañías en el mercado, aunque lo más probable es que Iberia Express acabe desapareciendo bajo la marca Vueling y ésta última aerolínea pase a operar todas las rutas nacionales y europeas de Iberia. De esta forma, la antaño línea aérea pública española centrará su negocio en los vuelos de largo recorrido, a países latinoamericanos y africanos.
Vueling nació en 2004 como la primera aerolínea de bajo coste española. Con el objetivo de competir contra esta compañía, Iberia creó la firma Clickair, cuya base se estableció en Barcelona. Pronto se verificó que no había mercado para ambas y se dio paso a una fusión de las mismas. De esta manera, Iberia entró en el capital de Vueling, con el 45,85%. Este simple hecho habría obligado a Iberia a presentar una OPA por la totalidad de Vueling, pero la Comisión Nacional de la Competencia le permitió no hacerlo, restrigiendo sus facultades de gestión en Vueling. La estrategia de Iberia ha pasado por la puesta en marcha Iberia Express como camino intermedio, una compañía de menores costes para sus vuelos nacionales y europeos, que será el ariete para complementar la oferta de rutas de Vueling.
La compra se formalizará durante la primera parte de 2013 y todavía es pronto para saber cómo afectará a la estrategia de todas las compañías implicadas. En la comunicación enviada a la CNMV, IAG asegura que la gestión de Vueling seguirá siendo independiente “con un modelo de negocio distinto al del resto de sociedades operadoras del grupo”. Además, en grupo explica que la base operativa de Vueling seguirá siendo Barcelona.