MADRID.- La desaparición de Feve (Ferrocarriles de Vía Estrecha), empresa pública que se ha encargado de prestar el servicio de ferrocarriles en el Norte de España, hará que la deuda de Renfe aumente de forma considerable. El Gobierno ha decidido extinguir esta compañía y repartir sus activos y pasivos entre Renfe y Adif, y el gestor de infraestructuras ferroviarias.
En una orden ministerial aparecida en el Boletín Oficial del Estado (BOE) se traspasan 169,99 millones de deuda de Feve a Renfe, el 28,9% de los créditos totales de Feve, que ascienden a 588,56 millones de euros a 31 de diciembre de 2012, según los datos publicados en el BOE. El resto de la deuda se traspasará a Adif, ya que se corresponde con inversiones en estaciones e infraestructuras ferroviarias, que son competencia de esta empresa pública.
La orden realiza una segmentación de la deuda de Feve. Así, en préstamos del Banco Europeo de Inversiones (BEI), la firma pública debe devolver 326,73 millones de euros. En lo que se refiere a préstamos a largo plazo (más de un año) con entidades de crédito, Feve debía hasta el 31 de diciembre 175,33 millones de euros. Por último, en líneas de crédito a corto plazo, la compañía pública cuenta con una deuda de 86,50 millones de euros.
Entre los bancos acreedores de Feve (que ahora lo serán de Renfe y Adif) se encuentran La Caixa, con créditos por valor de 115,33 millones de euros; BBVA, con 20 millones de euros; Bankia (antes Caja Madrid), con 40 millones de euros; Bankinter y Pastor, con 67 millones entre los dos; Banesto Oviedo, con 3,5 millones; Kutxabank y Banco Herrero, con ocho millones cada uno.
Según los Presupuestos Generales del Estado para 2013, la deuda de Renfe a cierre del último ejercicio era de 5.027,93 millones de euros, mientras que la previsión para este año es que la misma ascienda a 5.322,91 millones. El año 2013 será el de la liberalización del sector ferroviario español y el de la más que probable apertura del capital de Renfe a empresas privadas. En una información revelada por este medio, Renfe no cuenta con el preceptivo contrato-programa firmado con el Estado para prestar los servicios de Cercanías y Media Distancia, por el que se transfieren cada año a la empresa pública cerca de 480 millones de euros.
