MADRID.- LATAM, el conglomerado nacido de la fusión de las aerolínea chilena LAN y la brasileña TAM, se ha encontrado con Cristina Fernández, presidenta de Argentina. Hace varias semanas, el Organismo Nacional Regulador del Sistema de Aeropuertos (Orsna) dictó una resolución por la que obligaba a los aviones de la compañía LAN a abandonar el hangar que ocupan en Aeropuerto Jorge Newbery, muy cercano a Buenos Aires, la capital de Argentina. Toda una explulsión en regla.
El problema que late bajo esta decisión se llama Aerolíneas Argentinas, la compañía aérea del estado, que no ha dejado de ser deficitaria en los últimos años tras su expropiación al quebrado Grupo Marsans, holding español dedicado a los viajes de Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual. De hecho, en 2012, Aerolíneas Argentinas ha perdido casi 1.000 millones de dólares, lo que da idea de su falta de competitividad y de la nefasta dirección del negocio. Por otro lado, Aerolíneas casi supone un monopolio en el sector aéreo argentino, ya que tiene casi todos los derechos de los vuelos internos dentro del país.
LAN ha pagado el alquiler del hangar en el aeropuerto Jorge Newbery (20.000 dólares al mes, con contrato hasta 2023, según The Economist) y opera desde el mismo 14 rutas. ¿Por qué echarle del mismo? Se trata del aeródromo más cercano a la capital, que cuenta con otro, el Aeropuerto internacional Ezeiza, pero que se encuentra a una hora de Buenos Aires y para acceder a la ciudad se debe usar una carretera siempre ocupada. Es decir, nada apetecible para los clientes. El caso es que Aerolíneas Argentinas es dirigida por el núcleo más cercano a la presidenta Fernández (conocido como “La Campora”). Mariano Recalde, director de la compañía aérea, ha declarado que “LAN tiene una posición privilegiada, que no merece y que está empezando a perder”. Por su lado, Axel Kicillof, viceministro de Economía argentino, ha sido más radical: “no queremos competencia y el objetivo final es que [el aeropuerto] Jorge Newberry sea usado sólo por Aerolíneas Argentinas”.
De momento, el caso se va a ventilar en los tribunales. La jueza argentina Claudia Rodríguez ha ordenado al Gobierno que se abstenga de desalojar a LAN del hangar que tiene en el Aeropuerto Jorge Newbery, hasta que se pronuncie sobre la legalidad de la decisión tomada por el ORSNA. La jueza pide al Gobierno que informe sobre la situación en los próximos cinco días y sostiene que no se ha dado a la aerolínea el tiempo suficiente para justificar convenientemente el recurso ante la medida de expulsión, según informa el diario La Nación.
En juego están 3.000 empleos, a parte del 11% del negocio de LATAM. Los sindicatos de trabajadores aéreos habían convocado protestas y huelgas para el 29 de agosto, aunque se han visto postergadas ya que en esa fecha Ignacio Cueto, presidente de LAN, se reunirá con Kicillof para tratar el problema y abordar posibles soluciones.