MADRID.- La fiesta de las comunidades autónomas en Fitur llega a su fin. Los recortes presupuestarios a los que se están viendo abocadas las regiones españolas harán que el gasto en expositores desorbitados de algunas de ellas se reduzcan para la edición 2012 de la feria turística. Algunas comunidades ya han dado a conocer cuál será su inversión para promocionar el destino en la feria a medida que se van elaborando y presentando los presupuestos del año 2012.
Así, la comunidad de Murcia ya no acudirá a Fitur con un stand de 1.000 metros cuadrados, valorado en 600.000 euros, sino con un “espacio profesional” de 200 metros cuadrados y que tendrá un coste de 70.000 euros, según ha explicado Pedro Alberto Cruz, consejero de Cultura y Turismo. El responsable de turismo ha añadido que el dinero que no se gaste en la feria “se va a derivar a otra serie de acciones, como las misiones comerciales a los países nórdicos, Gran Bretaña, Alemania o Rusia, a través de los cuales se van a conseguir muchas líneas de negocio”.
Andalucía tambié aplicará recortes. La Junta ha explicado que cuenta con un presupuesto de 1,8 millones de euros para acciones de promoción turística. La reducción es considerable, ya que durante varios años Andalucía ha destinado cerca de tres millones de euros para construir su stand en Fitur, aunque en 2009 ya inició los recortes. El expositor de Andalucía era de los más reconocidos, ya que en algunas ediciones llegó a ocupar casi un pabellón entero de la feria.
Por su lado, Baleares ha decidido aplicar la misma política. El archipiélago ha llegado a gastarse en sus stands de Fitur 7,4 millones de euros en los pasados cuatro años, más 5,5 millones en la feria ITB que se celebra en Berlín y 5 millones en el evento World Travel Marke de Londres. Se dará más presencia a la parte profesional y menos importancia a la institucional, con la redución de autoridades en la feria.
Las restantes autonomías irán dando a conocer sus planes para Fitur en las próximas semanas, pero se esperan importantes reducciones en algunas como Castilla-La Mancha (con un déficit y endeudamiento importante) e incluso Cataluña y Navarra, siempre caracterizadas por sus espacios amplios. Quizá la crisis venga bien a Fitur y logre convertir la feria en un evento profesional en el que generar negocio.