MADRID.- Las pernoctaciones en alojamientos turísticos extrahoteleros (apartamentos, campings y establecimientos de turismo rural) alcanzaron la cifra de 102,8 millones en 2011, un 5,2% más que en 2010, según los datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística (INE, acceso al estudio). Las noches que han pasado los residentes en España aumentaron un 1,6% (38,95 millones) y las de no residentes crecieron un 7,5% (63,91 millones). Las cifras muestran que es el turista extranjero quien sostiene el negocio del alojamiento extrahotelero, algo parecido a lo que sucede con los hoteles. La estancia media en este tipo de establecimientos bajó un 0,7% en 2011, situándose en 5,8 noches por viajero.
En lo que se refiere a los apartamentos turísticos, las pernoctaciones aumentaron un 7,1%1 en el año 2011. Las noches de los residentes se incrementaron un 2,3% y las de no residentes un 8,8%. Además, el 51,0% de las pernoctaciones se concentraron entre los meses de junio y septiembre, lo que revela la importancia de este tipo de alojamiento en la temporada estival. Es el turista británico el que más uso hace de los apartamentos.
Por su lado, las pernoctaciones en acampamentos turísticos aumentaron un 2,8% en el año 2011. Las de viajeros residentes crecieron un 2,9% y las de no residentes un 2,6%. El 71,3% de las pernoctaciones se concentraron en el periodo de junio a septiembre. En este tipo de establecimientos es el viajero holandés el más preponderante.
En lo que respecta a los alojamientos rurales (casas y hoteles), las pernoctaciones registraron un aumento del 0,3% en el año 2011. En este caso se nota la debilidad del mercado nacional, ya que las noches de residentes bajaron un 3,5% con respecto a 2010, mientras que las de no residentes crecieron un 19,3%. El 51,8% de las pernoctaciones se concentraron entre junio y septiembre. A pesar de que las noches de los extanjeros han experimentado un incremento de dos dígitos, la realidad es que el número absoluto de turistas foráneos que usan este tipo de alojamiento es muy reducido: 335.413 frente a 2,38 millones de residentes en España. Es decir, el turismo rural sigue dependiendo en gran medida del cliente español, que atraviesa una fuerte crisis de consumo.