Las pistas de esquí españolas pierden clientes en favor de las francesas y andorranas

MADRID.- Un 77% de los españoles han realizado una salida a la nieve, bien sea para disfrutar de la misma o para esquiar, en los últimos doce meses, un 3% más que en el periodo anterior. Este es el dato que arroja una reciente encuesta realizada por Atout France, la oficina de turismo que se encarga de promocionar Francia. En total se ha encuestado a 1.521 personas.

Otro de los aspectos que refleja el estudio es que los españoles somos muy caseros. El 65% de los entrevistados han acudido a alguna estación de esquí española; el 19% ha preferido desplazarse a Andorra; el 14%, a Francia; y el 1,5%, a Austria. Aunque a simple vista parece que las estaciones nacionales, que presentaron la temporada hace pocas semanas, ganan en el cómputo, existen ciertos matices a tener en cuenta. Según Atout France, el número de esquiadores en estaciones españolas disminuye un 10% con respecto a la temporada de nieve anterior. Mientras, la cantidad de esquiadores que se desplazan a pistas Francesas se incrementa en cinco puntos y en siete puntos en caso de las estaciones andorranas. Es decir, que las estaciones españolas han perdido clientes en favor de las andorranas y francesas.

El informe también muestra que un 28% de las salidas que realizan los españoles a una estación dura entre 4 y 5 días, mientras que un 27% de las salidas son escapadas de 3 días. Es curioso ver como sólo un 2% de los encuestados reconoce que acudió 10 días o más a una estación de esquí. Quizá los costes de alojamiento y forfait sean excesivos para disfrutar más de una semana de la nieve. A pesar de ello, un 40% de los entrevistados aseguran que han dedicado más de 500 euros en su viaje a la nieve, mientras que un 28% ha reservado entre 350 euros y 500 euros para este menester.

Otro dato interesante es que el 28% de los viajeros de esquí eligen alojarse en un apartamento para disfrutar de sus días, mientras que un 24% lo hace en hoteles de tres estrellas y un 16% en hoteles de cuatro y cinco. La libertad que da un apartamento, en el que no hay horarios estrictos de comidas parece que hace inclinarse a los turistas por este tipo de establecimiento.