MADRID.- El Airbus A380 no está teniendo buena suerte en su salida al mercado. El fabricante europeo tendrá que someter a revisión todos los “superjumbo” en servicio al detectarse un problema por la aerolínea australiana Qantas en los amarres de una de las alas de la aeronave. Este defecto produce grietas de unos dos centímetros en las alas que podrían poner en peligro la seguridad de los vuelos.
El fallo se ha detectado tras una revisión solicitada por una circular de la autoridad europea de seguridad aeronáutica (EASA, por sus siglas en ingles) para las 68 aeronaves en servicio del modelo.
Sin embargo, Rafael Alonso, vicepresidente ejecutivo de clientes de Airbus, ha explicado que los problemas ocasionados por las grietas “no afectan en absoluto a la seguridad”.Alonso detalló que el constructor ha identificado un problema en la aleación de dichos amarres que va a ser solucionado de manera inmediata con un “kit” de reparación que aplicarán las aerolíneas.
Además, el fabricante de aviones está modificando el procedimiento de producción para que los nuevos aparatos que se comercialicen no tengan este problema. Alonso también ha recordado que todos los programas suelen tener algún tipo de complicación en los primeros años y ha resaltado que este tipo de problema no es estructural ni presenta riesgo para la seguridad.