Grecia e Israel han firmado un acuerdo para relajar las restricciones de viaje a Grecia para los ciudadanos israelíes que hayan sido vacunados contra el Covid-19. A finales de enero, Kyriakos Mitsotakis, primer ministro griego, propuso la creación de un pasaporte en la Unión Europea (UE) para aquellas personas vacunadas. La idea es que estos ciudadanos vacunados puedan viajar sin límites dentro de la UE.
“Tenemos que facilitar los viajes a las personas que presenten una prueba de su vacunación y esto es lo que pretendemos hacer con Israel”, ha explicado Kyriakos Mitsotakis en una conferencia de prensa conjunta en Jerusalén con Benjamin Netanyahu, primes ministro de Israel. Aquellos israelíes vacunados podrán moverse por Grecia sin problemas y sin tener que guardar cuarentenas a la llegada al país europeo.
El turismo aporta una quinta parte de la riqueza de la economía griega y emplea a uno de cada cinco trabajadores. En 2020, el negocio turístico se desplomó en Grecia por los efectos del Covid-19, reduciendo los ingresos a 4.000 millones de euros desde los 18.000 millones de 2019.
El acuerdo con Israel se produce en un momento en el que el país mediterráneo avanza de forma veloz en la vacunación de sus ciudadanos, aunque con críticas por ser selectivo con los palestinos que malviven en las zonas ocupadas como Gaza o Cisjordania. La vacuna que se está inoculando en Israel es la versión de Pfizer Inc-BioNTech.
La propuesta del pasaporte vacunal de Mitsotakis ha sido acogida por algunos países de la UE, pero no por todos. Estados como Portugal o España, muy dependientes también de su turismo apoyaron esta medida. Sin embargo, en la última reunión de Jefes de Estado y Gobierno de la UE no llegó a aprobarse y lo máximo que se consiguió es una declaración sobre su estudio. Los críticos del pasaporte sanitario afirman que estos certificados podrían ser discriminatorios y que no está claro la eficacia de las vacunas para detener el contagio.