MADRID.- El colectivo de pilotos de Iberia no cederá tan fácilmente a la creación de la nueva compañía de bajo coste, Iberia Express, que pretende el grupo. Las espadas están en alto y los comandantes de la aerolínea se plantean adoptar “cualquier medida” contra la puesta en marcha de una estrageia que califican de “ilegal” y que les perjudica. El lunes, más de 500 pilotos ratificaron en asamblea esta idea, según ha informado el sindicato Sepla a Europa Press.
Según el sindicato, la puesta en marcha de la nueva empresa es “ilegal”, ya que en el convenio de los pilotos figura el compromiso de la dirección de Iberia de “no segregar la operación de vuelo salvo acuerdo previo con la sección sindical”. Por ello, Sepla ha insistido en que tomará las “medidas legales oportunas”. Entre estas medidas se incluye la huelga, como ya se autorizó a Sepla en el pasado mes de mayo.
Los pilotos de Iberia, único colectivo con el que la aerolínea no ha llegado aún a un acuerdo para la renovación de su convenio, se reunirán de nuevo el próximo lunes. La dirección de la aerolínea pactó con los colectivos de personal de tierra y tripulantes de cabina (TCP) unas cláusulas vinculadas a la nueva marca en sus respectivos convenios.
Por su lado, Rafael Sánchez-Lozano, consejero delegado de Iberia, ha afirmado que si los pilotos convocan una huelga será “difícil de justificar”, ya que la nueva filial de la aerolínea no solo no afectará a las condiciones laborales y salariales actuales de los empleados de la compañía sino que generará 500 nuevos empleos a finales de 2012.
Sin embargo, los pilotos se quejan de que esta aerolínea supondrá romper el convenio, crear contratos “basura” y perder poder adquisitivo. Además, el colectivo de comandantes también asegura que los detalles sobre la nueva filial no están claros y no son públicos.
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