MADRID.- Con casi medio año avanzado se puede adelantar que el negocio turístico español crecerá un 2% en 2014, iniciando el camino de una incipiente recuperación tras seis años de crisis. Esta es la previsión que Exceltur, la asociación de grandes empresas turísticas españolas, realiza para el PIB turístico, un indicador que pretende medir la contribución de la actividad turística en la economía. Este aumento supondrá más trabajo en el sector turístico y la posibilidad de que las empresas empiecen a mejorar su rentabilidad.
La “culpa” de que el negocio turístico español vaya mejor en 2014 la tiene el visitante extranjero (hasta marzo han llegado un 7,9% más que hace un año, según Frontur), pero en la presentación de las previsiones para todo el año, José Luis Zoreda, vicepresidente ejecutivo de Exceltur, destacó que la mejoría en los viajes de los españoles ha empujado al alza el indicador del PIB turístico. Es decir, que por primera vez en los últimos años, el turista español se empieza a mover. Esta no es una tendencia de 2014, sino que se viene notando desde mediados de 2013, cuando las noches que los españoles han reservado en hoteles se han venido incrementando de forma paulatina. Hace una semana, CEHAT, la asociación hotelera, explicaba que las reservas para la Semana Santa han aumentado un 17% con respecto a 2013. A estas alturas también se conoce el nivel de reservas que los viajeros extranjeros han realizado para pasar su verano en España y, viendo la festividad de Pascua, se espera que este verano los españoles viajen más.
Con estos datos, desde Exceltur también llaman a la precaución en su informe de previsiones. La actividad en el sector turístico se irá ralentizando a medida que avance el año por dos causas principales. En primer lugar, destinos competidores como Egipto celebran elecciones presidenciales en las próximas semanas y si las mismas empiezan a traer algo de paz al país mediterráneo, con toda seguridad su sector turístico se irá recuperando, lo que restará viajeros internacionales (sobre todo británicos y alemanes) a España. Por otro lado, la crisis de Ucrania y Rusia provocará una caída en el valor del rublo frente al euro, lo que puede restar viajeros rusos a España. La fuerte dependencia de los negocios turísticos españoles del visitante extranjero puede ser el principal talón de aquiles de este sector económico en el caso de que se produjese una desviación hacia otros países.
De esta manera, las empresas esperan que hasta el verano su rentabilidad crezca, aunque de forma muy moderada. Ello conllevará incrementos en el número de puestos de trabajo que se creen en el sector turístico. Hay que tener en cuenta que el aumento de empleos en turismo suele preceder a una subida de trabajo en otros subsectores de servicios, como los comercios o la restauración. Entre enero y marzo se han creado más de 30.000 empleos en el sector turístico.