MADRID.- Qantas ha registrado un beneficio de 250 millones de dólares australianos (181,4 millones de euros) en su ejercicio fiscal 2010-2011, que finalizó el pasado 30 de junio, lo que supone un incremento del 123% con respecto a los 112 millones de dólares australianos (81,2 millones de euros) obtenidos en el ejercicio precedente, según la información facilitada por la aerolínea.
Las cifras se conocen semanas después de que Qantas anunciase su intención de despedir a 1.000 empleados y crear dos aerolíneas de bajo coste para competir en el mercado asiático. Alan Joyce, consejero delegado, ha afirmado que el beneficio es el “mejor desde le inicio de la crisis financiera mundial” y ha destacado que se ha logrado pese al impacto de desastres naturales (terremoto y tsunami de Japón y nube de cenizas volcánicas en Chile). La compañía cifra en 224 millones de dólares australianos (162,5 millones de euros) las perdidas producidas por las adversidades naturales y climatológicas.
Otro de los problemas que ha señalado Joyce es que Qantas tuvo que afrontar “un aumento del 28% en el precio del combustible y un bajo rendimiento en el negocio internacional”. Los ingresos del grupo han llegado a los 14.894 millones de dólares australianos (10.809 millones de euros), un 8% más que en el ejercicio 2009-2010. En cuanto a los costes, aumentaron un 7%, hasta los 14.250 millones de dólares australianos (10.337 millones de euros). Hasta agosto, la compañía estima que sus gastos por crudo para el primer semestre del próximo ejercicio aumentarán en 500 millones de dólares australianos (362,6 millones de euros).
Plan de choque
En la actualidad, el grupo tiene una plantilla de 36.000 personas y ha asegurado que la reducirá en 1.000 empleados en los próximos años. En el mismo plan, a cinco años, se contempla la adquisición de aviones al fabricante Airbus y grandes alianzas con otras aerolíneas, incluyendo British Airways (ahora parte de IAG junto con Iberia) y la chilena LAN.
Además, Qantas quiere crear dos nuevas líneas aéreas para dividir su negocio. Por un lado, una nueva aerolínea de bajo coste’ centrada en el negocio asiático, que se denominará Jetstar Japan, y donde tendrá como socios a Japan Airlines y Mitsubishi. Por otra parte, la compañía australiana también planea lanzar otra firma aérea enfocada al segmento premium, lo que conlleva una remodelación de todo su negocio internacional.
Por otro lado, Qantas ha anunciado que ha llegado a un acuerdo con la firma británica de motores Rolls-Royce, que abonará a la aerolínea 95 millones de dólares (68,9 millones de euros) en concepto de indemnización por el incidente con un A380, que obligó a la aerolínea a dejar en tierra todos sus ‘superjumbos’ en noviembre de 2010.
