MADRID.- Renfe empieza a preparar el adelgazamiento de su plantilla con motivo de la apertura del negocio del tranporte de viajeros por ferrocarril a otras empresas. La compañía pública ha propuesto a los sindicatos un expediente de regulación de empleo (ERE) de carácter “voluntario y universal” para deshacerse de 500 de sus 14.800 empleados en 2013. El sector ferroviario del sindicato CCOO ha explicado que la operadora no prevé reponer estas plazas. También queda por saber cuál será el recorte de plantilla que se llevará a cabo en Adif, el gestor de infraestructuras ferroviarias, a través de otro ERE. En esta empresa pública trabajan unos 14.300 empleados.
La negociación del ERE en Renfe ha dado comienzo. No obstante, de momento no se han dado a conocer de forma pública las indemnizaciones que se podrían pagar a los trabajadores que se acojan voluntariamente al Expediente de Regulación de Empleo. Directivos y sindicatos quieren negociarlo en la mesa que se abrirá con este fin.
Según ha informado diversas agencias, Renfe ha manifestado su intención de estudiar la posibilidad de introducir una tasa de reposición siempre que se reduzcan las indemnizaciones de quienes se acojan al ERE. Esta reposición sólo se daría en las áreas de viajeros y de talleres de la empresa.
A finales de julio de 2013 se producirá la liberalización “legal” del negocio ferroviario, con años de retraso y con la amenza de un expediente sobre España, aunque en la práctica ninguna empresa, excepto Renfe, transporte viajeros. Con la idea de prepararse para la segura competencia que se abrirá en los próximos años, Renfe ha iniciado un proceso de reducción de sus costes. De momento, la compañía se dividirá en cuatro: tres de ellas heredarán los negocios de transporte de viajeros, de mercancías y talleres (junto con la deuda de cada negocio), y la cuarta recibirá el nuevo negocio de alquiler de trenes a otros operadores.