En Enciso se distribuyen cerca de 1.400 huellas de dinosaurio a lo largo de siete yacimientos que se encuentran al aire libre. Para acceder a estas zonas, una vez que entramos en el pueblo de Enciso, debemos cruzar el puente sobre el río Cidacos, donde hay señales que indican los recorridos y donde se inicia la ruta de los dinosaurios de Enciso. El lugar no tiene pérdida, porque justo al cruzar el puente nos encontramos con “Barranco Perdido”, un parque de atracciones para niños y familias en el que se hace una somera interpretación de los dinosaurios y sus restos.
Una vez cruzado el puente del río Cidacos, debemos seguir la carretera que une Enciso con Cornago (LR-286). La misma nos conduce a través de un valle en el que se disponen los yacimientos, perfectamente señalados, con las huellas de dinosaurio y paneles explicativos. Nosotros pudimos acceder a varios de ellos, como el de Villar-Poyales (ver vídeo más arriba), uno de los más relevantes, con 84 huellas sobre una pared.
Huellas de dinosaurio en el yacimiento de El Villar-Poyales de Enciso (La Rioja) | Foto: Beatriz de Lucas Luengo
En este yacimiento se definió por primera vez una nueva huella, denominada “Theroplantigrada encisensis”. Corresponde a un dinosaurio bípedo (que camina sobre dos patas) y plantígrado, que apoyaba toda la planta del pie, no sólo los dedos, y que contaba con una membrana entre las falanges. Hay que imaginarse que el área en el que se encuentran las huellas pudo ser el lecho de un río o una zona embarrada y que los millones de años, la erosión y los movimientos tectónicos han colocado lo que sería el suelo en una posición casi vertical.
Entrada al yacimiento de Valdecillo, en Enciso (La Rioja) | Foto: Beatriz de Lucas Luengo
Otro de los yacimientos mejor interpretados, con paneles y reproducciones de los dinosaurios, es el de Valdecillo. En esta zona se encuentran icnitas de dinosaurios carnívoros que medían entre 7 y 10 metros de alto. En la parte media del yacimiento se han encontrado huellas de una familia de iguanodotes, compuesta por dos adultos y una cría.
El yacimiento más activo de La Rioja es el de la Virgen del Campo, donde aún se siguen realizando excavaciones y labores para consolidar los afloramientos de icnitas. En este lugar hay 506 pisadas de dinosaurio, señales de arrastre de colas e incluso los arañazos de las garras de estos reptiles cuando nadaban. Quizá lo más llamativo son los fósiles de huellas que muestran que aquí se produjo una pelea entre un dinosaurio carnívoro y otro herbívoro.
Los dinosaurios en la Tierra
Estos reptiles gigantes pisaron la Tierra hace entre 200 y 66 millones de años, por lo que, en contra de lo que muestran muchas películas, nunca convivieron con el ser humano. Lo que hoy es La Rioja, dentro de la Península Ibérica, fue en ese momento una zona de marismas. Por ello también hay fósiles de conchas de moluscos en muchas paredes y en el terreno.
Plataforma con las huellas de plantígrado en El Villar-Poyales, Enciso (La Rioja) | Foto: David Fernández
La cantidad de huellas con que cuenta La Rioja la convierten en una de las regiones más importantes del mundo en lo que se refiere a este rastro de los dinosaurios. Se han clasificado cerca de 9.000 icnitas en la región desde que en 1971 se documentasen las primeras.
