MADRID.- Otro avance para los derechos del consumidor, pero fuera de España. La aerolínea irlandesa Ryanair ha sido condenada en Holanda por cobrar, sin avisar, una comisión al pagar con tarjeta de crédito la compra de sus billetes. La autoridad holandesa que se encarga de aplicar el código de publicidad (Dutch Advertising Code Committee) ha sido la encargada de imponer la sanción a la compañía. El procesó arrancó tras la presentación de una denuncia por uno de los integrantes de Gebta, asociación de agencias de viajes de negocios, en Holanda. La denuncia se basaba en que Ryanair no avisaba, a la hora de anunciar el precio del billete, que el pasajero debe abonar “una suma significativa” al pagar con tarjeta de crédito.
El denunciante ejemplificaba esta práctica argumentando que cuando un viajero compra un billete de avión en Ryanair dentro de Holanda, se le cobra un cargo adicional de 50 euros en concepto de tasas de administración. El cliente se puede evitar el cobro de esta comisión si cuenta con una tarjeta prepago determinada, pero que no se encuentra disponible en Holanda. Tras evaluar el caso, el Dutch Advertising Code Committee determinó que estos costes adicionales por usar tarjeta de crédito no son opcionales ni evitables, por lo que se deben incluir en el anuncio del precio del vuelo. Ryanair recurrió, pero finalmente el comité que vela por una publicidad clara ha decidido en su contra y ha instado a la aerolínea a no hacer publicidad de esta manera.
Hasta 70 millones en España
La firma irlandesa no es la única que realiza estas prácticas. Otras compañías de bajo coste tampoco anuncian las comisiones que cobran por el pago con tarjeta de crédito, como Vueling en España o Easyjet. En mayo, la Unión de Consumidores Catalanes (UCC) denunció a Ryanair por añadir un cargo en los billetes de avión pagados con tarjeta de crédito, haciéndolos pasar por una tarifa administrativa. La asociación denunciaba que en los vuelos de ida y vuelta se cobra por duplicado, aunque sólo se trata de una sola operación de pago. La cantidad puede llegar a los 12 euros.
Desde la UCC estiman que Ryanair puede haberse embolsado en un año más de 70 millones de euros con estas prácticas, partiendo de los supuestos de que la mitad de los españoles que volaron con la aerolínea usasen este medio de pago y teniendo en cuenta que transportó a 26,5 millones personas en 2010 en España.