Seychelles ha anunciado su apertura al turismo internacional a partir del 25 de marzo, según un comunicado del organismo nacional de turismo. El archipiélago compuesto por un centenar de islas recibirá visitantes independientemente de si se han vacunado o no contra el coronavirus SARS-Cov-2. Sin embargo, los turistas sudafricanos, uno de los países en los que se ha desarrollado una de las mutaciones más contagiosas del coronavirus, todavía no podrán entrar en Seychelles.
La apertura de este país del Océano Índico, frente al África Oriental, se ha anunciado por Sylvestre Radegonde, ministro de Relaciones Exteriores y Turismo. Los visitantes que deseen acceder al país deberán presentar una prueba de PCR negativa realizada 72 horas antes de la salida. Además, los visitantes no tendrán que cumplir ningún requisito de cuarentena ni restricción de movimiento en Seychelles. Tampoco deberán permanecer un número mínimo de días en los alojamientos del país a su llegada.
Sin embargo, los visitantes sí están obligados a usar mascarillas, mantener la distancia social y la higiene regular de manos, medidas sanitarias que se impusieron en todos los países del mundo al inicio de la pandemia de coronavirus hace un año. El paso que ha dado Seychelles es esencial para su economía, pues este archipiélago vive enteramente del turismo. En 2019, el país recibió 428.000 turistas e ingresó 109 millones de dólares. El turismo y las actividades relacionadas aportan a Seychelles el 72% de su riqueza anual.
El ministro Radegonde ha explicado que Seychelles relaja las medidas de acceso por “la agresiva campaña de vacunación que el país emprendió a principios de año”. En enero de 2021, Seychelles lanzó una campaña de inmunización para suministrar la vacuna a sus ciudadanos, algo menos de 100.000 personas repartidas por las principales islas del archipiélago. Hasta el momento, el 25% de la población de Seychelles está vacunada, según las cifras de OurWorldinData. Seychelles será un experimento como primer destino con su población inmunizada contra el Covid-19. La llegada de turistas, con vacuna o sin ella, servirá para saber qué pasa en un país donde se ha alcanzado la inmunización total.