MADRID.- Al parecer un turista leonés ha interpuesto una demanda judicial contra las mujeres de la conocida isla de Phen, en Polinesia, por haberle acosado sexualmente durante su estancia en dicho paraíso.
El hombre, que prefiere mantener su identidad en el anonimato, por evidentes razones, expone en su acusación que nada más arribar a la isla, una horda de mujeres desenfrenadas y, para su sorpresa, también algunos hombres con largas melenas atadas en cola de caballo, salieron a su encuentro para ofrecerle todo tipo de servicios, que él juzgó innecesarios a priori. Posteriormente la amabilidad de los lugareños le resultó simpática en un principio, pero en breve se dio cuenta que se trataba de una impostura con el único fin de atraerlo hasta un punto de “no retorno” en el cual estaría a su completa disposición.
Tras ofrecerle una deliciosa y opípara cena de Navidad, llegó una noche de alcohol sin límite en forma de diversos y diferentes cócteles de frutas y vivos colores. Llegada la mañana cayó en la cuenta de la encerrona y pensó que pretendían robarle “hasta la camisa”, pero nada más lejos de su intención, cuando un grupo de señoras ataviadas con sus mejores galas, destaparon sus oscuras intenciones haciendo al interfecto proposiciones “muy deshonestas”.
Tras rechazar un primer grupo, fue presa de nuevas proposiciones por partes de un segundo e incluso de un tercer grupo, hasta que consiguió escapar de la fiesta. Camino al hotel, recibió nuevas invitaciones por parte de transeúntes y paseantes sin aparente relación con la fiesta de la que acababa de huir. Aterrorizado acudió al cuartel de policía más cercano y relató su historia a los agentes de la ley, que por su parte, también le ofrecieron formar parte de su “pequeña fiesta privada”.
Casi sin aliento, el turista leonés, salió despavorido en dirección a su hotel, para recoger su equipaje y dirigirse al aeropuerto dando por terminadas sus vacaciones de invierno. Una vez en tierra, se puso en contacto con su abogado para iniciar los trámites pertinentes que le permitan alcanzar un resarcimiento justo.
Por su parte, los habitantes de la isla de Phen, niega rotundamente los hecho, alegando que el turista “llegaba una curda de escándalo” y aprovechan para invitar a todo aquél que quiera a visitar Phen y comprobar personalmente que en su isla no se ha dado nunca ningún caso de acoso sexual, especialmente grupos de solteros con ganas de divertirse.
Nota: Esta noticia ha sido una broma con motivo del Día de los Inocentes. Pedimos disculpas a quien haya podido creérsela.